Un argentino visionario en el desarrollo inmobiliario
Issel Kiperszmid es un empresario argentino que ha dejado huella en el sector inmobiliario, comenzando su carrera en La Plata y convirtiéndose en un referente en el desarrollo de nuevas áreas en crecimiento.
Inversor de renombre: René Favaloro
Uno de sus primeros inversores fue el reconocido médico argentino, René Favaloro, famoso por su contribución a la medicina. Kiperszmid recuerda con cariño cómo, mientras esperaba a que Favaloro saliera de operaciones, discutían sobre inversiones en departamentos. Esta asociación fue clave en sus inicios, pues Favaloro utilizó su fortuna para apoyar diversos proyectos inmobiliarios.
El auge de Canning: una oportunidad única
En los años 90, mientras otros desarrolladores concentraban sus esfuerzos en la zona norte de Buenos Aires, Kiperszmid decidió explorar el sur, específicamente Canning, una localidad que prometía un crecimiento exponencial gracias a la construcción de nuevas autopistas. “Agarramos un mapa y nos pusimos a estudiar qué zonas tenían fácil acceso a la capital y buenas posibilidades de desarrollar grandes emprendimientos”, comenta Kiperszmid.
Transformando la calidad de vida en la región
Al principio, Canning era visto como un lugar de fin de semana. Sin embargo, el objetivo de Kiperszmid era atraer a residentes permanentes, ofreciendo un estilo de vida de calidad para aquellos que buscaban escapar del bullicio de la ciudad. Así, desarrolló Campos de Echeverría, un barrio que se caracteriza por sus casas uniformes y accesibles, lo que permitió que más de 548 familias encontraran su hogar en la zona.
Un futuro prometedor en el Distrito Camino Real
Hoy, Kiperszmid mira más allá de Canning, hacia una nueva área que está comenzando a ganar popularidad: el Distrito Camino Real. Este nuevo polo se ubica estratégicamente en la intersección de la Autopista Ezeiza-Cañuelas y la Presidente Perón, facilitando aún más el acceso a futuros habitantes.
Kiperszmid tiene planes ambiciosos para esta región, donde el desarrollo de su proyecto Aluen avanza a paso firme, con una inversión de US$20 millones y una proyección de crecimiento que promete superar a Canning en los próximos 15 años.
Conclusión: un legado en construcción
Issel Kiperszmid no solo se dedica a construir viviendas; su visión abarca la creación de comunidades. La inclusión de instituciones educativas y la apuesta por un modelo de construcción semi-industrializada destacan su compromiso con la innovación y la calidad de vida. Su historia es un reflejo del potencial argentino en el ámbito inmobiliario y una inspiración para futuros desarrolladores.